Útero en retroversión o útero invertido ¿Es un problema?…
El útero en retroversión suele ser llamado también útero invertido y se refiere a una posición diferente a la habitual en las mujeres. El útero tiene forma de pera invertida y normalmente el fondo suele estar dirigido hacia la parte delantera de la mujer, es decir hacia la vejiga. Cuando el útero está en retroversión, el fondo del útero se dirige hacia la espalda, es decir, hacia el recto.
Normalmente ésta forma del útero puede no ocasionar ningún problema ni impide el embarazo, pero en otras ocasiones puede ocasionar dolor con la regla (Dismenorrea) y/o con las relaciones sexuales (Dispareunia). El útero en retroversión puede ser ocasionado por algún problema de base como la endometriosis o las adherencias pélvicas secundarias a un proceso infeccioso pélvico.
En algunos casos se sugiere que el útero en retroversión es ocasionado por endometriosis crónica y en otras se comenta que el útero en retroversión será causa de que la mujer puede desarrollar endometriosis. ¿Qué es primero, el huevo o la gallina?
Síntomas
Los síntomas de esta posición del útero son variables. Muchas de las veces no se presentarán molestias, pero otras, puede haber dolor pélvico, estreñimiento o los síntomas ya descritos como dismenorrea y dispareunia. Todo el cuadro clínico mencionado puede ser ocasionado por la posición del útero o bien por la patología que es la causante de que el útero se encuentre así.
Se estima que hasta el 20% de las mujeres pueden tener el útero en retroversión y que al menos el 50% no tiene ningún síntoma y por tanto desconocen que tienen este problema al que muchos ginecólogos simplemente lo consideran una variante anatómica.
Otras causas además de la endometriosis (Que es la más común) que pueden ocasionar que el útero se encuentre en dicha posición pueden ser los miomas uterinos, los quistes ováricos, adherencias tras procesos infecciosos pélvicos o bien tras cirugías ya sea pélvicas o intestinales.
Tratamiento
El tratamiento del útero en retroversión estará dirigido tanto a solucionar los síntomas de la paciente como la causa del problema. Muchas veces, las molestias se solucionarán administrando antiinflamatorios, otras veces la ingesta de anticonceptivos orales mejorará el dolor pélvico o la dismenorrea sobre todo en pacientes con endometriosis no diagnosticada. El uso del DIU hormonal también puede ser una solución para pacientes seleccionadas.
Cuando se llega a confirmar que es la endometriosis o las adherencias pélvicas la causa del dolor, la cirugía laparoscópica podría estar indicada. Cabe mencionar que en muchas ocasiones esta cirugía, que en principio es sencilla, podría solucionar un problema crónico con franca mejoría para las pacientes.
Si le han diagnosticado útero en retroversión o si por los síntomas descritos usted tiene dudas acerca de padecer alguna de las enfermedades descritas, acuda con su especialista. Siempre será mejor tratar un problema cuando apenas inicia. Junto con su ginecólogo podrán tomar la mejor decisión para usted.
Clínica Imar, pendientes de tu salud reproductiva.