¿Por qué ocurre y cómo solucionarlo?…
¿Por qué ocurre el estreñimiento?
El estreñimiento es un síntoma muy común en el embarazo, ya que los cambios hormonales que se producen influyen en la regulación del intestino de manera muy directa. El desplazamiento del intestino, debido al crecimiento del útero, provoca que este órgano ralentice su funcionamiento y ocasione la aparición de estreñimiento en la gestante. La constipación intestinal se caracteriza por una reducción en el número y peso de las deposiciones. Se entiende como algo habitual estimándose que más de la mitad de mujeres embarazadas lo padecen y resulta ser una de las molestias más incómodas y desagradables durante la gestación.
¿Qué complicaciones puede ocasionar el estreñimiento?
En caso de estreñimiento prolongado es necesario consultar con un médico, ya que a parte de las incomodidades que provoca, puede derivar en problemas más graves como las hemorroides o un problema denominado impactación fecal. El esfuerzo que se realiza al evacuar o eliminar heces duras, puede ocasionar la aparición de hemorroides, que son venas inflamadas que aparecen en la zona rectal y anal. Pueden resultar muy molestas y pueden ir acompañadas de dolor, sangrado, escozor y prurito (picor excesivo). Tras el parto, el esfuerzo realizado por la madre puede ocasionar la aparición de nuevas hemorroides.
¿Cuáles son situaciones de riesgo para desarrollar estreñimiento?
- Mayor edad gestacional. Cuanto más grande es el feto más presiona al intestino.
- Embarazo gemelar.
- Diabetes gestacional no controlada con feto macrosómico.
- Obesidad.
- Antecedente de estreñimiento.
- Malos hábitos alimenticios.
- Falta de ejercicio.
¿Cuáles son los principales síntomas del estreñimiento?
- Varios días sin evacuar.
- Heces duras, compactadas y difíciles de evacuar.
- Dolor intestinal o sensibilidad abdominal. “Calambres intestinales”
- Aumento de los ruidos intestinales.
- Pérdida de apetito.
Algunos consejos prácticos para evitar el estreñimiento
- Aumentar ingesta de líquidos. Se recomiendan 8 vasos de agua al día. El agua ayuda a aumentar el volumen de las heces, al mismo tiempo que facilita su evacuación.
- Aumentar consumo fibra. 20‐35 g/día. Es necesario ingerir frutas como el kiwi o la papaya, verduras con fibra y alimentos integrales.
- Realizar ejercicio de manera regular. Caminar, nadar, realizar bicicleta fija, yoga… Es aconsejable caminar media hora por la mañana y media hora por la tarde. La natación puede practicarse un par de veces a la semana, durante una hora. Algunas posturas o ejercicios de yoga pueden ayudar a regular el tránsito intestinal.
- Destinar tiempo necesario. Intentar evacuar al levantarse o tras la comida ya que es en ese momento donde la motilidad intestinal se incrementa.
- Defecar en el momento de necesidad. No dejarlo para más tarde.
¿Puedo tomar laxantes en el embarazo?
Cuando a pesar de seguir las medidas generales y hacer ejercicio no se presenta mejoría es conveniente valorar el uso de algún tipo de laxantes. Tu ginecólogo podrá indicarte alguno que no sea perjudicial durante el embarazo. Clínica Imar, al cuidado de tu salud durante el embarazo.