Hiperplasia endometrial: ¿Qué es?

Conoce los problemas a los que te puede llevar tener hiperplasia endometrial

Como sabéis en Clínica Imar estamos totalmente comprometidos con la salud reproductiva y de la mujer. Por este motivo, tratamos de difundir conocimientos médicos relacionados con dicha área de conocimiento. En el artículo de hoy hablaremos sobre la hiperplasia endometrial. Para comprender mejor el tema propuesto, en primer lugar procederemos a revisar qué es el endometrio propiamente dicho para, posteriormente, analizar la alteración que hoy nos ocupa. Además, también veremos los síntomas más comunes y las repercusiones que esta enfermedad puede tener para salud de la mujer que la padece, así como las distintas pruebas que se pueden realizar para la correcta detección de esta afección. Esperamos que la información que hoy te brindamos sea para útil e interesante. Te recordamos que Clínica Imar cuenta con amplia experiencia y recorrido, estando compuesta por un equipo de ginecólogos y ginecólogas expertos. Si deseas saber más sobre hiperplasia endometrial, este artículo está especialmente escrito para ti.  

¿Qué es el endometrio?

Como decíamos, dedicamos esta primera sección a especificar de forma muy breve qué es el propio endometrio. De este modo podremos avanzar mejor hacia la comprensión de la hiperplasia endometrial. El concepto de endometrio puede definirse fácilmente como la capa más interna del útero. De este modo, podemos afirmar que es un tejido que se produce cada mes y cuyo objetivo principal será la preparación del útero femenino para una posible implantación embrionaria, comenzando así el proceso de embarazo. No obstante, en la mayoría de ocasiones el embarazo no llega a producirse, por lo que el endometrio es expulsado cuando a través de la menstruación. De este hecho, podemos deducir que en función del momento del ciclo en que se revise, el propio endometrio se presentará con distintas características.  

El endometrio y su relevancia en fertilidad

De los párrafos anteriores inferimos que la importancia que alberga el endometrio en la fertilidad de la mujer. Si bien no en todo caso sus características serán las apropiadas, su objetivo primordial es la recepción de los embriones, favoreciendo así su implantación en el útero. Aclaramos que, cuando se da la situación endometrial idónea para conseguir un positivo en embarazo, lo denominamos como endometrio receptivo. ¿Quieres saber más sobre las posibles enfermedades que afectarán al endometrio y la fertilidad de la mujer? En esta caso, te recomendamos la lectura de este artículo titulado Endometrio: Clave en la reproducción. En él hablamos sobre distintas afecciones tales como la adenomiosis, los pólipos endometriales, las malformaciones uterinas congénitas y los miomas uterinos. Si también deseas atender otros temas como la endometritis o el Síndrome de Asherman, también relacionados con el factor uterino, te recomendamos acceder al texto completo de Factor uterino, su importancia en la esterilidad.  

Hiperplasia endometrial: ¿Qué es?

Ahora que hemos abordado la definición del propio endometrio pasamos a ver la definición de hiperplasia endometrial. Si atendemos únicamente al término hiperplasia, veremos que puede describirse como el aumento o la elevación de forma excesiva de las células que componen un tejido u órgano. No obstante, debemos aclarar que, si bien dichas células no son cancerosas, sí que pueden derivar en cáncer. Esta producción de características anormales también puede ser denominada como hipergénesis. Aumentamos ahora nuestra visión para enfocarnos en la propia hiperplasia endometrial. Como podemos suponer, esta es una proliferación de carácter excesivo de las células que forman el endometrio.  

¿Cuáles son los síntomas que presenta?

La primera pista que un ginecólogo o ginecóloga recibirá sobre una posible hiperplasia serán las alteraciones que se hayan podido producir en el ciclo menstrual de la paciente. Este podrá ser de características abundantes, ya sea en cuando a la duración como a la cantidad. Además, los ciclos podrán ser irregulares, acortando su duración, llegando incluso a ser inferiores a 21 días. También se considerará como un síntoma asociado a la hiperplasia endometrial el sangrado producido entre distintos periodos menstruales y las hemorragias que puedan ocasionarse una vez que la mujer ha alcanzado la menopausia. Aunque estos sean algunos de los posibles síntomas que la paciente puede llegar a experimentar, son también conocidos los casos asintomáticos. Esto quiere decir que la paciente no presentará ninguno de los síntomas descritos anteriormente.  

Tipos de hiperplasia endometrial

Podemos decir que en la actualidad se establece una tipología con 4 vertientes, las cuales presentamos a continuación:

• Simple sin atipias: Su riesgo de progresión a cáncer es pequeño, llegando a alcanzar aproximadamente un 1,5% en un espacio de tiempo que abarca una década.
• Compleja sin atipias: En ella observamos un aumento de posibilidad de progresión a cáncer de endometrio de hasta el 3%.
• Simple con atipias: Tiene un riesgo de derivar en carcinoma endometrial inferior al de su equivalente compleja. Esto puede ocurrir si no es tratada como es debido por parte de un equipo de profesionales.

• Compleja con atipias: Se considera como un posible desencadenante del carcinoma endometrial.

 

¿Qué puede causar la hiperplasia endometrial?

En muchos casos, la alteración que nos ocupa puede estar ocasionada por un desequilibrio que afecte a hormonas estrechamente relacionadas con el ciclo de la mujer: La progesterona y los estrógenos. Por un lado, la progesterona será la encargada de indicar al cuerpo el momento propicio para el desprendimiento del endometrio. Por otro, los estrógenos tienen un papel relevante en el crecimiento de las células endometriales. Por este motivo, una bajada de la primera y subida de la segunda puede llegar a dar como resultado la hiperplasia endometrial.  

Factores de riesgo

Existen algunos factores de riesgo que aumentan la probabilidad de que tú puedas padecer cáncer de endometrio y, por tanto, deberás ser más previsora con el diagnóstico de esta patología. Dichos factores son:

• Antecedentes familiares de cáncer de endometrio o de ovario
• obesidad
• Diabetes tipo II
• SOP
• Cáncer de mama o de ovario
• Hiperplasia endometrial

 

¿Cómo puede detectarse esta enfermedad?

Una de las principales pruebas que puede realizarse durante una revisión ginecológica será la propia ecografía. Esta puede llevarse a cabo para conocer distintos aspectos relacionados con el interior del cuerpo y, en este caso, para estudiar el correcto desarrollo y crecimiento del endometrio. Si nuestro ginecólogo o ginecóloga observa una medida demasiado ancha en este tejido, esto puede considerarse como un indicativo de que la paciente puede padecer hiperplasia endometrial. Además, también puede ser diagnosticada por medio de la puesta en práctica de una histeroscopia. Dicha prueba nos permite visualizar el interior del útero y, por tanto, nos permite estudiar el endometrio. Esta última prueba puede realizarse en conjunto con una biopsia endometrial, para la cual será necesario extraer una muestra que, posteriormente, será analizada en el laboratorio.  

 

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Te recordamos que el equipo de profesionales de Clínica Imar queda totalmente a tu disposición en caso de que así lo necesites. Si deseas pedir una cita con uno de nuestros ginecólogos o ginecólogas, así como resolver cualquier tipo de duda con respecto a la propia hiperplasia endometrial, puedes hacerlo a través de este enlace, que te permite contactar con nosotros.